martes, 30 de abril de 2013

un post con decibeles altos.

Vieron que en las películas francesas se dicen las peores cosas en susurros? Bueno, mi peli es bien tana. Y no me jacto precisamente de esto.
Soy gritona. No grito para hablar en mi vida cotidiana -si bien tampoco tengo un tono bajo. No grito para llamar la atención. No suelo gritar de alegría. No me gusta gritar en público. No grito cuando me enojo con alguien. Grito cuando me pongo nerviosa. O mejor dicho, cuando me angustio. Grito cuando no quiero oír algo. O cuando eso que oigo viene muy de adentro mío y lo quiero tapar. Grito de impotencia, y grito de dolor: un dolor pasado todavía no sanado o un dolor presente.
La mayor parte de las veces grito por miedo.
Y lo que sale de mi garganta puede parecerse a un alarido.

Hace años que intento doblegar este aspecto de mi personalidad. Porque si bien lo reconozco y soy capaz de admitirlo, lo rechazo de lleno. Intenté con yoga, en terapia, con pastillas, globulitos, con el conteo hasta 10, y hasta con el método que usé para dejar de fumar -"Sólo por hoy, no grito".
Es muy de nosotras lo de gritar. Lo sé porque mis amigas -al menos las que se animan a hablar de sus peores cosas- me lo han confesado. Pero imagino que no a todas nos horroriza del mismo modo.A mí no me funciona como descarga, sino más bien todo lo contrario.
Pasa que el grito no es un lenguaje universal. Pretende hacerse oír, pedir algo -me he encontrado pidiendo a los gritos un abrazo, un beso, amor en definitiva- sin más resultado que la confusión y el espanto.
Pasa que gritando nadie se entiende, y que a quien tenemos al lado puede traerle ecos lejanos que preferiría no seguir escuchando.
Ustedes tienen tendencia a gritar? La manejan? Cómo? Qué hacen sus medias naranjas cuando ustedes gritan? Es su media naranja la que grita? Qué hacen ustedes?
Hoy se habilita a pleno el comentario anónimo.
Necesito escucharlas. Eso sí, háblenme suavemente.

c.

21 comentarios:

  1. Yo soy de gritar o eso dicen, a veces ni me doy cuenta que estoy gritando. Trato de no gritarle a los chicos, no es un buen ejemplo y por suerte lo estoy logrando. También mis gritos son cuando estoy nerviosa. Besote

    ResponderEliminar
  2. Yo soy la que grita. Mi marido jamás aunque cuando se le vuelan los pájaros si lo cargoseo mucho puede levantar la voz pero no grita. Soy tana. Es justificación? ;D

    ResponderEliminar
  3. Grito TODO el tiempo....
    Hablo y grito y lo peor es que para mi NO estoy gritando. Marinovio me mira con cara de espantado... y me dice no grites.. a lo q yo respondo NO ESTOY GRITANDO!!! QUERES Q GRITE??
    Una bestia, eso me siento cuando grito mas de lo q grito....
    cecilia (me hago cargo)

    ResponderEliminar
  4. Bué... yo soy tana también, así que grito, traté mucho tiempo de controlarlo, pero hace un tiempo entré en una etapa desfachatada que no me importa nada, sólo me importa y me cuido con los chicos, que trato de no gritarles, me funcionó mucho respirar hondo en cuanto abro la boca la gritar! Pero claro a las 8 de la mañana cuando sí o sí se tienen que estar subiendo al auto para ir al colegio, y siguen bajando y subiendo la escalera para buscar algún juguete que quieren llevar para el recreo o una pavada me ataco y arranco a los gritos pelados!!
    No sé, éxitos???

    ResponderEliminar
  5. Pero no sé si tenés que doblegar esto...creo que es parte de tu forma de ser, de tu esencia...por más glóbulos que te mandes, esa sos vos. Yo también soy gritona y es parte de mí, esa soy yo...no creo que esté mal. Besote!

    ResponderEliminar
  6. le grito a los gatos, mi novio tiene 4 y piden comida todo el día aunque estén satisfechos. Les grito y a veces hasta les tiro un "No entendés?".
    Me hiciste reir con lo de "-me he encontrado pidiendo a los gritos un abrazo, un beso, amor en definitiva- sin más resultado que la confusión y el espanto."
    Y me gustó la tarea del "por hoy no grito". Voy a jugar a eso, pero hoy no, mañana. Hoy ya grité.

    ResponderEliminar
  7. De tana me sobran miles de caracteristicas, incluyendo la del grito. Pero la verdad que por general me sale cuando estoy contando algo entusiasmada. No grito cuando me enojo pq directamente no soy de pelearme. Sí, defiendo mis posturas a full pero para eso, manejo mucho la mirada (onda clavo los ojos jeje) y un tono imperativo (pero no alto). Cuanto menos ruido adentro de la cabeza, mejor uno dice las cosas que realmente necesita decir. Y mejor escucha tb ;o)

    ResponderEliminar
  8. Uy,Ceci,tocaste un tema...yo no gritaba,antes,ahora cuando me saco me doy cuenta que sí¡mientras estoy a puro grito!y no me gusta escucharme a mí misma en esos momentos de sacadez.Eso sí,después pregunto-Grité mucho?:)

    ResponderEliminar
  9. Yo no era gritona o al menos no me consideraba una persona gritona. Yo era una persona tranquila, relajada hasta para hablar...pero hace 9 años que convivo con un tano 100% original...y con esto creo que ya no tengo nada más que agregar...! :P

    IGUAL CREO QUE GRITAR DEBES EN CUANDO HACE BIEN PARA DESCARGAR TENSIONES Y BLABLABLA....ahora me siento mejor :P

    besos

    ResponderEliminar
  10. Tmb soy descendiente de tanos por lo cual suelo hablar un poquito fuerte (pero no a los gritos) cuando me entusiasmo. Ahora, si me enojo, al contrario: tono grave de acero y a media voz (acompañada de mirada de "asesina" según mis amigos).

    Phoebe

    ResponderEliminar
  11. Me quede pensando, ademas de los gritos que uno conoce... a veces me sucede que mi propio grito me espanta y me deja agotada y triste. No se bien, me parece que es cuando grito porque creo que estoy enojada pero en verdad estoy triste o asustada o angustiada. Ese grito que me sorprende y odio de alguna manera creo que tiene ese efecto porque sale en lugar de algo que comunique lo que me pasa.
    Bueh, me deja pensando.
    Y de paso te digo: estoy por empezar a ver "el ldron de orquideas" ja.

    Un beso grande
    Ana

    ResponderEliminar
  12. cuando dicen que grito en realidad hablo apasionadamente, y cuando grito posta posta
    me desconozco tanto (o me conozco tanto) que termino perpleja y angustiada tratando de encontrar y reconocer cuál es y dónde está mi verdadera voz

    ResponderEliminar
  13. Yo prefiero...
    el grito al susurro...
    las emociones fuertes a las rutinas lavadas...
    la desesperación a la letanía...
    la gente que se pregunta antes que la gente que se controla...
    un grito a tiempo que seguir sin ser escuchada...
    sigo?

    ResponderEliminar
  14. hay un libro para chicos en el que por obra y arte de un genio , una nena puede cambiar el volumen de la voz de su mamá. El problema es que a veces queda tan baja que no la escucha o tan alta que la abuela decide tirar su audífono.
    La autora lo dedica "A mi mamá que nunca me gritó".
    En general me preocupa más cuando hablo de más, la falta de paciencia o de humor y coincido con China en preferir el grito al susurro.
    Igualmente me esfuerzo para evitar volver a oír a mi hija menor gritándme que nole grite más...
    Un beso

    ResponderEliminar
  15. Yo hace unos años que trato de no gritar. Sobre todo a mi hija porque uno si no se agota de solo escucharse. Entonces trato de explicar, de negociar, de consensuar. Todo muy lindo, pero un chico de tres años es un chico de tres años y una madre es una madre, así que cuando me saca pego un solo grito, puede ser una frase, o una palabra. Un solo segundo con tanta ira que me queda doliendo la garganta. Es decir, soy un desastre.
    Habrá que ver donde esta el punto que no podes controlar esos gritos. O por ahí no están tan mal.... hacen falta a veces....

    ResponderEliminar
  16. Creo que podriamos asociar al grito como al sintonizador de nuestras voces, creo que si analizas la mayoria de las veces el equalizador funciona, y quizas el grito opera como metafora audible en este caso, jeje, de cuando estamos fuera de eje, creo que nos pasamos muchas veces tratando de ser lo mejor que podemos y el grito viene a ser el sintoma de lo corridas de eje que estamos de la conexion con nuestro instinto que nos dice no me estas escuchando necesito algo y no se como pedirlo o decirlo, creo que el grito nos reclama que lo escuchemos y en este caso vos al preguntarte en este post estas queriendo escuchar lo que los gritos te vienen a decir........es un buen camino, no se de soluciones magicas pero si de preguntas que habilitan la reflexion, y eso estamos a mi entender, bienvenida la reflexion!! besos!!

    ResponderEliminar
  17. Generalmente no grito, pero cuando aparece el grito es porque me saqué...últimamente me pasa más seguido con mi niña, pero no me gusta...y obvio a ella tampoco...a veces le pido disculpas...
    No me gusta el grito pero a veces es lo único que calma a las fieras.
    Que lindo Ceci volver por acá!
    Espero que vos y Tomás se encuentren bien. Besos!!!!

    ResponderEliminar
  18. Yo tengo el problema opuesto. Nunca grito. No me sale. Ni para llamarle la atención a algún amigo que me cruzo por la calle y saludarlo.
    Cuando me enojo, me impaciento pero nunca grito. Llega un punto que es un problema esto de mantener siempre el mismo tono, porque hay cosas que merecen ser gritadas a los 4 vientos...
    Que terminen bien la semana!
    Ángeles

    ResponderEliminar
  19. No grito jamás, Ceci.
    Odio que me griten y me parece que uno grita cuando siente que no lo escuchan.
    Besos mil!
    An

    ResponderEliminar
  20. yo grito mucho de emoción, pero yo no sabía que realmente gritaba hasta que me mudé con pablo y bueno, llegaron algunas peleas. por suerte son las menos, y la verdad me odio gritando en vibra negativa! no puedo creerlo. me da miedo no poder controlarlo porque ME MUERO tener hijos que escuchen pelearnos a los gritos (aunque más no sea una por mes).eso. alguien dijo catársis???

    ResponderEliminar
  21. Gracias Vero! Sí, catarsis, ja. Dijimos catarsis. Te entiendo tanto. Comparto 100 por ciento.
    Y agradezco la sinceridad de todas!!!

    ResponderEliminar

¡Gracias por leer!