tan simple como papa y limón.

Definitivamente, cuando conocí Oui Oui caí rendida y enamorada. Fue hace unos 4 años.. y estaba solito en su cuadra, sin food factories, Bartolas u otros imitadores. Pablo me decìa: hay un lugar que te va a encantar y no se equivocó. Pero creo que el amor duradero se selló en el mismo momento en el que probé los que , creo, son sus mayores hits: las papas al romero y esa limonada, ESA limonada.

Claro que por màs vecinos que seamos, no podemos ir a dejar nuestros sueldos ahí todas las semanas, así que me busqué un modo de tener un poquito de Oui Oui en casa. Y creo haber conseguido un modo bastante aproximado de reproducir en casa esos dos sabores que me fascinan. No es mucha ciencia, tan sólo uno o dos secretitos. Y aquí paso a explicárselos:

Para la lemonade pelás 1/2 kilo de limones, los desemillás y los metés en una batidora junto con 1/2 litro de agua fría, 1 cubetera de hielo (podés romperlo un poco antes) y mucha azúcar. Oui oui si en algo no escatima es en azúcar, poderosa reductora de la acidez del limón. Ah, y no te olvides de las hojas de menta fresca cortadas en pedacitos. Si ponés jenjibre que sea el fresco rallado, y poca cantidad. La otra muy buena es la de reemplazar a ambos por albahaca, ¡queda muy refrescante!!! No hay mucho más misterio!

Para las papas: Qué ricas son las papaaaaaaas, no Rita?



Las pelás o las lavás muy bien lavadas, las cortás en bastones gruesos. Primero a la mitad longitudinal y luego cada mitad transversal. Después las ponés en agua hirviendo. (Subrayo: hirviendo) por tres minutos y las sacás con una espumadera.
Durante esos 3´calentaste una asadera con abundante oliva o el aceite que tengas al horno. Sacás la asadera y ponés las papas con la menor cantidad de agua posible, las embadurnás muy bien en el aceite -meté mano, después te lavás!!!- y ahí les desarmás por encima unas ramitas de romero y dejás alguna que otra entera. También metés un limón partido en cuatro cuartos con la cáscara para abajo. Bien, en horno medio cuando estén doradas de un lado, las das vuelta.
Cuando están doradas del otro lado las sacás y con ayuda de un guante o algo que aisle tus deditos del calor, exprimís los limones ya asados sobre las papas.
Así se hacen las papas alla oui oui. Con una carnecita y unos verdes, van fabulosas. Y se comen con los dedos ¡Ni falta hace que lo aclare!!
Y bueno, a esto le llamo ponerle un poco de amor francés a la mesa.
¡Espero que la hayan disfrutado! Ahora me voy a chusmear sus blogs, que ayer no tuve tiempo. Besos enormes y muy pero MUY buen fin de semana!
pd: Ésta, dice blogger, es la entrada 701. Fá.