"¿Limo?" pensé cuando vi la solicitud de amistad en Facebook. "A ver..." Un amigo en común: Valeria D. "¡Vale!" Y sí, claro, si Vale es eso, una amiga que hace poco, entre divertida y entusiasmada, me había contado de un mini emprendimiento con su mamá, una ilusión que estaban tejiendo con mil colores que por un rato la distraía de los números monocromáticos de su profesión como economista: el tal Limo.
Un par de manos habilidosas, una coqueta tiempo completo y todo ese amor madre- hija de por medio no podían más que crear un gran proyecto, ¿no?
"Una madre muy habilidosa", ratifica Vale. "Pero que no se anima a ofrecer las maravillas que hace y una hija que ….. se animó". Gran intro. Y aclara: "Todo lo que hace Limo es artesanal, porque Bibi (a.k.a. su mamá) lo crea con sus manos".
Ahá. Empezaron con aros y collares y la idea es ir innvovando en accesorios y decoración, todo tejido con una aguja y mucha imaginación.