una piba con la remera de Greenpeace.

Muchachada, llegué rota, así que saldrá un post cortísimo. Entre otras cosas estoy bajando la adrenalina de hoy! Más de 10 horas de entrenamiento, hoy mucho más físico que ayer. Para que se den una idea, terminé arrestada y esposada en un calabozo.
Se acuerdan que hace un tiempo decía lo sano y enriquecedor que es salirse un poco de la zona de comfort? Bueno, ayer y hoy fueron eso. Celular apagado, computadoras bien lejos. Puro cuerpo, diálogo y trabajo en equipo.
Aprendí mucho sobre lenguaje corporal y gestual, en especial de la mirada. Aprendí a lidiar con la autoridad sin violencia y la importancia que tiene dar una imagen sólida. Viví en carne propia la fuerza de la coordinación y el propósito común de un grupo.
También ahora sé - o confirmé- que lo que más me cuesta es la confianza en mí misma y en la red que hay de backup. No logré por más que lo intenté tirarme para atrás desde una escalera. Por más que se me permitió hacerlo desde el escalón más bajo, por más que mis compañeros me daban coraje y me esperaban abajo con un colchón de brazos. Subí ahí y me tuve que bajar. Y encima tiré un "Perdón!" Tengo que trabajar ese aspecto. El salto al vacío, suelta, sin nada de qué agarrarme. Me acordé de este capítulo de Sex and the City, que cierra una de las temporadas, y que siempre amé, seguramente por sentirme muy identificada.
Y bueno, será que estoy donde tengo que estar.

Hasta el lunes. Disfruten mucho el fin de semana. Apenas pueda me voy a recorrer blogs que estos días no pude. Los dejo con el Indio, ideal para musicalizar este momento.